Una vez que el pequeño Liszt fue reconocido en su tierra, y de que gozara de una modesta beca. Adam Liszt decidió que era necesario que su hijo estudiara en el extranjero, Viena era el lugar indicado, pensaba que le traería muchos beneficios a Franz desarrollarse en aquella ciudad. Sus conocidos pensaban que sólo un loco abandonaría un puesto de trabajo seguro. Antes de irse, Adam le escribió una carta de agradecimiento al príncipe:
"Los progresos de mi hijo, sus triunfos en el país y en el extranjero, los consideraré como una gloria particular de la casa principesca, puesto que sólo podré realizar mis proyectos contando con la magnánima benevolencia de vuestra alteza."
Al llegar a Viena los Liszt se alojaron en una posada que se encontraba en los alrededores de la ciudad, era mucho más barato estar ahí que buscar una habitación en la ciudad, por pequeña que esta fuera.
Adam se dedicó a buscar un maestro para su hijo, mientras Franz no dejaba de estudiar sus lecciones.
El maestro elegido por Adam era nada más y nada menos que Carl Czerny (a quien vemos en la imágen sacada de la wiki). Cuando Adam le comunicó a su hijo que irían a verlo le recomendó que tocara con la máxima atención, ya que era muy difícil que lo aceptara como alumno.
Llegaron a la casa del músico y fueron recibidos por la madre del mismo, la amable señora les anticipó que si querían ver a su hijo con la intención de que les diera lecciones, eso sería inútil pues ya tenía su agenda llena, sin embargo Adam insistió en verlo, finalmente el joven músico accedió y se sorprendió agradablemente cuando vió y escuchó tocar al niño con gran habilidad el más difícil de sus ejercicios. Fue tan buena la impresión que le provocó que accedió a tomarlo como alumno, cobrando en un inicio una suma simbólica por lección, y después de enseñarle por 2 semanas y de ver claramente lo que el pequeño podía llegar a aprender, decidió no cobrar un centavo.
Adam se dedicó a buscar un maestro para su hijo, mientras Franz no dejaba de estudiar sus lecciones.
El maestro elegido por Adam era nada más y nada menos que Carl Czerny (a quien vemos en la imágen sacada de la wiki). Cuando Adam le comunicó a su hijo que irían a verlo le recomendó que tocara con la máxima atención, ya que era muy difícil que lo aceptara como alumno.
Llegaron a la casa del músico y fueron recibidos por la madre del mismo, la amable señora les anticipó que si querían ver a su hijo con la intención de que les diera lecciones, eso sería inútil pues ya tenía su agenda llena, sin embargo Adam insistió en verlo, finalmente el joven músico accedió y se sorprendió agradablemente cuando vió y escuchó tocar al niño con gran habilidad el más difícil de sus ejercicios. Fue tan buena la impresión que le provocó que accedió a tomarlo como alumno, cobrando en un inicio una suma simbólica por lección, y después de enseñarle por 2 semanas y de ver claramente lo que el pequeño podía llegar a aprender, decidió no cobrar un centavo.
Czerny no sería el único maestro de Liszt en Viena, de eso hablaremos en el siguiente post.
No hay comentarios:
Publicar un comentario